No obstante, al comparar diferentes análisis de ciclo de vida entre sí, con el objetivo de identificar el más sostenible, es crucial que haya disponibles datos equivalentes para los productos y procesos en cuestión. En otras palabras, no es posible comparar las manzanas con las naranjas. Si un producto tiene una disponibilidad de datos mucho mayor, no puede compararse equitativamente con otro producto que tenga unos datos menos detallados. Al hacerlo, se llegaría a conclusiones erróneas y se frustraría desde el principio el objetivo de realizar un LCA.
Si usted es un ingeniero de automoción y está interesado en ver el ciclo de vida completo de un vehículo, puede utilizar una herramienta excelente llamada Modelo de GHG y Energía Automotriz ("Modelo UCBS"). El modelo, desarrollado por la Universidad de California en Santa Bárbara, ayuda a los usuarios a analizar el impacto medioambiental de los diseños de vehículos utilizando la evaluación del ciclo de vida (LCA). Obténgalo aquí
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Nos centraremos en el acero como ejemplo para reducir emisiones de CO2. La imagen situada más abajo muestra que el acero tiene una ventaja frente a otros materiales ligeros: emite menos CO2 durante su producción. No obstante, también hay diferencias entre aceros. SSAB cuenta con uno de los procesos de producción de acero más limpios del mundo y, utilizando acero avanzado o ultrarresistente, puede reducir aún más las emisiones, dado que estará utilizando menos acero.